Ah, la Plaza Carranza
Ay, la Plaza Carranza
A usted,don Venustiano
que ha visto tanto
le pregunto, varón barbado y miope
varón hierático y marmóreo
le pregunto
varón de luz
¿Ha visto a Juan García?
¿A nuestro Juanito Garcia?
¿Al trovador de Delicias y
su guitarra?
¿ Lo ha visto pasar
por esa plaza vieja
que es su casa construida en el 49 por J Laing
su coterráneo?
¿ Lo ha visto
caminar
afinando
su guitarra de Paracho?
Si lo ve no le tome a mal
que busque algo
no le tome a mal
que busque en vano
la banca de mármol verde
en que se sentaba
a afinar su lira
No le tome a mal
si le pregunta
sabe bien que su alma trovadora
hace tiempo está extraviada
en las notas y en la letra
de sus canciones y sus sones
Dígale que se acerque a usted
que le cante a usted
una o dos de sus canciones
Dígale que usted
como él
está solo
en su soledad atemporal
que le acompañe un rato
que le comparta un rato
sus penas y alegrías
Y al verlo que se aleja rumbo
al antro más cercano
a alegrar y hacer llorar
a sus audiencias
solitarias
ebrias de nostalgia
ahítas de recuerdos
pida a Dios el milagro
de que sus manos
cobren vida
y con un pañuelo invisible
limpien de sus antiparras
de viejo sabio
la lágrima invisible
con que su canto
ha empañado
al cantarle
canciones de Cohauila
de Cuatro Ciénegas
aquel pueblo
cautivo
en su memoria
prodigiosa
canciones
que hace tanto no escuchaba
como el corrido
de Hilario Carrillo
el padre de Luciano
nuestro charro de charros
aquel charro revolucionario que murió al fallar
una mangana
Que su mano mese
su barba lentamente
pensativamente
como la mesaba
al dictar
el Plan de Guadalupe
y la Constitución del 17.